Hoy en día, la implementación de dispositivos IoT se ha vuelto parte de la vida cotidiana de las personas, pues no importa en qué ámbito se desarrollen, la presencia de esta tecnología es tan fuerte como el internet. En entornos empresariales, permite automatizar gran parte de los procesos tanto administrativos como productivos, llevando el camino de miles de empresas hacia el éxito de su transformación digital.
Gracias a su versatilidad de aplicación y amplia capacidad de adaptación a diferentes entornos, necesidades y capacidades en las empresas, los expertos estiman que las conexiones de dispositivos IoT pueden llegar a 16.500 millones para 2025 a nivel mundial.
Sin embargo, a pesar del potencial de crecimiento de esta tecnología y la cantidad de beneficios que puede traer al desarrollo de miles de empresas alrededor del mundo, la implementación de IoT supone una puerta de entrada para ataques cibernéticos de los que muchas empresas aún desconocen cómo protegerse en su totalidad.
Entre los principales riesgos de ciberseguridad por la implementación de IoT se encuentran:
- Riesgo de espionaje: La recopilación masiva de datos confidenciales a través de estos dispositivos puede representar un riesgo importante para entornos empresariales, pues el acceso no autorizado de terceros a información puede desencadenar acciones criminales que van desde espionaje industrial hasta pérdidas financieras.
En entornos domésticos, ciertos dispositivos pueden ser capaces de recopilar datos sobre el entorno familiar para cometer robos, secuestros, entre otras acciones delictivas graves, poniendo en riesgo la seguridad física de las personas.
- Ataques de malware y DDoS (Denegación de servicios): Muchos atacantes cibernéticos están aprovechando el malware para convertir los dispositivos IoT en en botnets. Esto con la finalidad de contribuir a la ejecución de ataques tipo DDoS, lo cual representa problemas productivos y financieros para las empresas.
- Rapto de dispositivos: Cuando terceros logran acceder a información confidencial también pueden usarla para controlar los dispositivos IoT a distancia. Al tomar el control pueden ser capaces de bloquear acciones específicas del dispositivo o su funcionamiento en general, y comúnmente suelen ofrecer un rescate a cambio de beneficios económicos.
Los riesgos de ciberseguridad que puede traer consigo la implementación de dispositivos IoT en cualquier entorno, sin duda representan pérdidas económicas inimaginables, además del inminente riesgo de exponer la integridad física de muchas personas; por ello, es imprescindible contar con un sistema de seguridad, protección y defensa adecuado a las necesidades y condiciones que implica esta tecnología.
Proteger a los colaboradores, clientes, las tecnologías operativas y las considerables inversiones empresariales con la implementación de un sistema de seguridad mejorado y especializado para la infraestructuras de IoT debe garantizar un enfoque integral, a través del cual se puedan aprovechar las tecnologías y los protocolos de IoT adecuados.
Especialistas recomiendan 3 estrategias para hacer frente a los retos de ciberseguridad en una infraestructura con implementación de dispositivos IoT:
1) Protección del aprovisionamiento de los dispositivos
2) Protección de la conectividad entre los dispositivos y la nube
3)Protección de los datos en la nube durante su procesamiento y almacenamiento.
En Censys no sólo impulsamos la adopción de tecnologías que impulsen la productividad, eficiencia y transformación digital de las empresas, sino que también nos enfocamos en ofrecer a nuestros clientes soluciones totalmente seguras e innovadoras, que les permita hacer frente a los desafíos tecnológicos de la industria.